Migao de la abuela

Hay sabores que nos llevan de vuelta a casa, que nos envuelven en recuerdos y nos hacen sentir el calor de quienes amamos. Nuestro Migao es más que una receta: es un homenaje a esos momentos en la mesa de la abuela, cuando el aroma del chocolate Corona llenaba la casa y las galletas Ducales crujían en cada bocado. Nuestro migao no requiere productos artificiales ni ingredientes ajenos a nuestra tradición. Es el migao que nos enseñaron nuestras abuelas sin exceso de sabores modernos que no cuentan nuestra historia. Es una mezcla perfecta de pan recién horneado, buñuelos crocantes, pandequesos y achiras, que aportan texturas únicas y ese inconfundible sabor a hogar. Pero hay dos ingredientes que lo hacen realmente especial: el chocolate Corona, con su dulzura profunda y envolvente que se funde en cada rincón de la taza, y las galletas Ducales, ese toque crocante y salado que equilibra el dulzor y despierta los sentidos con cada cucharada. Pero hay más. Este migao no solo rescata lo mejor de nuestras raíces, sino que también rinde tributo a nuestra identidad paisa con un ingrediente especial: la arepa. Un símbolo de nuestra cultura, que aquí se convierte en el alma de la receta, aportando consistencia, historia y ese amor que solo los paisas sabemos poner en lo que hacemos. Cada ingrediente tiene un propósito, cada bocado es un viaje a los momentos más cálidos de la vida. Porque en nuestro migao no solo hay ingredientes, hay emociones. Y no solo hay sabor, hay historias que se comparten en cada cucharada. Este no es un migao cualquiera, es el Migao de la Abuela: el que abraza, el que conecta, el que enamora.